Alguna vez te has preguntado, ¿Por qué es tan difícil encontrar el propósito de nuestra vida?

Desde pequeños nos preguntan constantemente: ¿Qué quieres ser cuando crezcas? Y la mayoría de nosotros no teníamos ni la menor idea. No sabíamos que responder y nos quedábamos con una sensación de vacío al no saber qué hacer.

Existen muchas razones por las cuales aún no conozcamos esa respuesta. A veces es porque los problemas del mundo nos parecen demasiado grandes, porque nos sentimos aislados del mundo o porque estamos muy agotados de la vida y no sabemos dónde encontrar la energía necesaria para luchar por lo que realmente nos importa. Pero encontrar y vivir nuestro propósito es clave para tener una vida plena y significativa.

¿Te gustaría aprender cómo encontrar el propósito a tu vida? Aquí te explico brevemente que fue lo que me ayudó a encontrar el mío y quiero que sepas que no estás solo. Muchos de nosotros en algún punto de nuestra vida nos hemos sentido perdidos, sin rumbo a dónde dirigirnos. Pero esta sensación se puede superar con el proceso correcto.

El primer paso es entender que el propósito en la vida es la razón por la que te levantas por la mañana ansioso por enfrentar tu día. Es más grande que un trabajo. Es lo que te impulsa. El propósito de tu vida te da sentido y conexión a todo y a todos a tu alrededor.

La gente tiene una necesidad natural de contar un sentido de propósito, es un sentimiento de que sabes quién eres y dónde encajas en el mundo, que tus metas y tus deseos están en sincronía.

Con frecuencia nos movemos a través de nuestras vidas sin saber muy bien cuál es nuestro propósito. Seguimos los estándares sociales que se nos han dado, por ejemplo: obtener buenas calificaciones, entrar en una buena escuela, obtener un buen trabajo, comprar una casa y empezar una familia.

Imponernos las expectativas de los demás pueden evitar que encontremos nuestro propósito. Hacemos lo que sentimos que otros esperan de nosotros, o lo que la sociedad en la que vivimos nos prescribe y no lo que nos hace feliz.

En algunos casos buscamos la validación de los demás en vez de la de nosotros mismos. En lugar de seguir una brújula interna, seguimos las recompensas. Llevándonos a una dirección que no queremos con nuestra vida, tratando de encajar en la versión de alguien más de éxito.

Por otro lado, compararnos constantemente con los demás, hace que perdamos el enfoque de nuestra vida. Olvidamos que las cosas que nos hacen feliz en la vida son diferentes para cada uno. Hay que recordar que la vida es un maratón, no una carrera y que cada uno avanza a diferentes tiempos. Encontrar un propósito en la vida es un proceso de mirar hacia adentro, no hacia afuera.

Por lo que el paso más importante para encontrar tu propósito es averiguar lo que quiere tu corazón. Teniéndolo puedes dar pequeños pasos para construir una vida que se alinee con esos deseos secretos. Para aprender a creer en ti mismo, para que puedas tener el valor de abrazar tus aspiraciones y hacerlas realidad.

Convierte lo que amas en tu propósito en la vida. Tus dones únicos, tu actitud, tus experiencias se combinan maravillosamente para crear una visión ideal de ti mismo. Vivir tu propósito de vida te traerá alegría y un sentido de satisfacción personal.

Una vez que tengas una ideas más clara de lo que te agrada, entonces estas cada vez más cerca de descubrir tu propósito. A continuación te comparto un ejercicio del Dr. Jack Canfield, que hemos utilizado en algunos programas de Coaching para ayudar a las personas a orientarse hacia su propósito. Tómate tu tiempo para realizar el siguiente ejercicio:

1. Enumera dos de tus cualidades personales que te distingan.
Ejemplo: entusiasmo, creatividad, etc

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2. Enumera una o dos formas en las que disfrutas expresando tus cualidades al interactuar con los demás 
Ejemplo: apoyar, inspirar, etc. 

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3. Imagina que, en este momento, el mundo es perfecto. ¿Cómo lo ves? ¿Cómo interactúan las personas? ¿Cómo te sientes? Escribe tu respuesta en forma de enunciado en tiempo presente, describiendo cómo se sentiría mejor, ese mundo perfecto tal como lo ves y lo sientes. Recuerda que un mundo perfecto es un lugar maravilloso y divertido. 

Ejemplo: Todos expresan libremente sus propios y exclusivos talentos. Todos trabajan en armonía. Todos expresan amor.

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4. Combina las tres subdivisiones anteriores en un solo enunciado (mira el ejemplo a continuación).

Ejemplo: Mi propósito es utilizar mi creatividad y mi entusiasmo para apoyar e inspirar a otros a que expresen libremente sus talentos con amor y armonía.

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Aquí tienes algunos ejemplos de propósitos:

• • Utilizar mi humor, mi creatividad y mis conocimientos para inspirar, animar y empoderar a las personas en proceso de recuperación a fin de que se mantengan sobrios (Terapeuta de adicciones)
  • Criar niños saludables y prósperos que se distingan en el mundo. (Mamá a tiempo completo)
  • Capacitar a los propietarios de PYMES para sistematizarlas, con el fin de facilitar la generación de ingresos. (Ingeniero y Consultora de PYMES)
  • Vivir cada día al máximo y retribuir tanto como sea posible, al mismo tiempo que valoramos alguien especial todos los días (Contratista y constructor)

Una vez que tengas tu propósito determinado y escrito. Léelo todos los días, preferentemente por las mañanas. Si eres una persona creativa quizás quieras hacer un dibujo o arte que represente tu propósito y lo pongas en un lugar visible donde lo veas todos los días. Eso te mantendrá en el curso correcto. ?

Espero que te haya gustado este artículo y me dejes un comentario. Recuerda siempre cultivar tus talentos, sumérgete en lo que te apasiona, usa tu creatividad. Y sobre todo, no olvides que tienes un lugar en el mundo que nadie más puede ocupar. Viniste a este mundo a ser feliz y hacer lo que amas.

¡No desistas!

Luz María
Coach Profesional